* Artículo publicado en La Revista de Blanquerna – Universitat Ramon Llull, en junio de 2021.

Nunca habíamos vivido una época en que fuera tan necesario el conocimiento, pero al mismo tiempo lo cuestionáramos tanto. Desde que vivimos inmersos en esta pandemia, hemos asistido al triunfo del conocimiento científico, que ha investigado para desarrollar la vacuna; del conocimiento político, que ha gestionado la transmisión de la epidemia; y del conocimiento tecnológico, que ha permitido un confinamiento hiperconectado que ha evitado mayores problemas en los ámbitos económicos y de la salud mental. A pesar del triunfo evidente del progreso, los negacionistas, que cuestionan la existencia de la pandemia o que atribuyen el origen a teorías conspiranoicas, son más visibles que nunca y movilizan cientos de miles de personas en todo el mundo. De hecho, la OMS, conjuntamente con UNICEF, la UNESCO y otras instituciones mundiales, alertó de un exceso de información falsa e incorrecta sobre el virus y su cuidado en septiembre del 2020. ¿Hemos perdido la confianza en la ciencia, las instituciones y los medios? Y, si es así, ¿cómo podemos recuperarla? ¿Qué futuro espera a nuestros jóvenes en una sociedad dominada por la incertidumbre?

Puedes consultar el artículo completo en catalán aquí.

Créditos de la imagen: Pere Virgili.